Cambio climático y turismo

La OMT destaca que el turismo es un sector muy sensible a los efectos del cambio climático.

En el año 2003, la OMT realizó su Primera Conferencia Internacional sobre Cambio Climático y Turismo en la ciudad de Djerba, Túnez con el objetivo de contribuir con la industria del turismo a responder a los retos del cambio climático.

Allí, consideró que el turismo, además de sufrir las consecuencias del cambio climático, es una actividad económica que contribuye al cambio climático.

 

En la Segunda Conferencia Internacional sobre Cambio Climático y Turismo en la ciudad de Davos, Suiza (2007) Principales conclusiones:

El clima es un recurso esencial para el turismo, que es un sector muy sensible a los efectos del cambio climático y del calentamiento global.

El turismo, de negocios y de recreo, seguirá siendo un componente fundamental de la economía mundial, una actividad importante para el logro de los objetivos de desarrollo del Milenio y un elemento positivo integrado en nuestra sociedad.

Adoptar con urgencia una serie de medidas

políticas que fomenten un turismo verdaderamente sostenible, que refleje la «cuádruple cuenta de resultados» en los ámbitos ambiental, social, económico y climático

Habrán de tomarse medidas para:

Mitigar las emisiones de GEI, derivadas especialmente de las actividades de transporte y alojamiento;

Adaptar las empresas y los destinos turísticos al cambio de las condiciones climáticas;

Aplicar las técnicas nuevas y las ya existentes para aumentar la eficacia del uso de la energía;

Recabar recursos financieros para ayudar a las regiones y a los países pobres

La desagregación por sector muestra que el transporte, incluyendo el aéreo, los automóviles y el ferrocarril, es responsable del 75% de las emisiones de GEI y el alojamiento contribuye con el 20% (aproximado) en calefacción, acondicionamiento de aire, bares, restaurantes, piscinas y otros servicios.

La industria del turismo, como parte del problema, está desarrollando soluciones e iniciativas en busca de lograr un equilibrio de la actividad y la conservación de los recursos naturales y el medio ambiente de los que depende.

Los ítems principales a tener en cuenta son:

  • Energía
  • Agua
  • Residuos

En cuanto a transporte aéreo, podemos mencionar que IATA, cuyas empresas miembro son responsables del 93% del tráfico aéreo internacional, se comprometió en 2009 ante ONU a reducir las emisiones del sector que representa con una estrategia basada en cuatro pilares:

  • Mejora tecnológica
  • Mejora en la gestión de las operaciones
  • Mejoras en la infraestructura
  • Medidas económicas como la compensación de las emisiones.