Susana Tilkin, propietaria de “Avataras Avataras”, habló con Nathalie sobre cómo cultivan la tierra – entre ellos 25 especies de tomates-, crían patos y gallinas, ordeñan la vaca que les da la leche con la que elaboran helados, cremas y dulce de leche casero. Además, en 3 hectáreas albergan su propia colmena, preparan dulces y conservas, estudian las variedades que pueden crecer en la zona. Como si fuera poco estos productores generan su propia energía y utilizan los desechos orgánicos para elaborar el compost que nutre sus plantaciones.
Susana señala que también brindan talleres de huerta y rescatan y difunden los alimentos que se habían perdido y son muy importantes para la salud.
Suárez Fernández afirma que quienes viven en Meliquina han aprendido a convivir adaptándose a ese entorno natural ya que, como asegura Tilkin “te vas adaptando a los ciclos de la naturaleza y a lo que te brinda en cada estación. Lo orgánico va al gallinero y lo que no puede ir ahí va a la compostera, donde están las lombrices californianas. De ahí se saca el abono para volver a las huertas, es todo un ciclo natural”.
Todos los residentes viven en una completa armonía con el entorno que los rodea. Hay varias hosterías, alguna despensa y locales donde se comercializan dulces y chocolates caseros, una casa de té y mucho amor por la tierra que reciben a los visitantes con los brazos abiertos.